Si habéis oído hablar de los peritos psicólógos pero no sabéis muy bien en qué consisten no os preocupéis porque os desgranamos todo lo que debéis saber al respecto de ellos. Desde en qué consiste su labor a qué son exactamente y para qué os podrían servir en un momento determinado.
Pues bien, un perito psicólogo no es más que un psicólogo que realiza su trabajo dentro del marco judicial, de tal manera que aplica sus estudios psicológicos en un marco diferente al que se daría en una situación convencional.
Por ejemplo, son los encargados de evaluar el daño psicológico que pueda haber generado a una víctima de accidente de tráfico, las consecuencias de una mala praxis médica, en divorcios y, en definitiva, en una serie de cuestiones escabrosas que requieren la voz y confirmación de un profesional para que acaben teniendo cierta fiabilidad y, de ese modo, el juez poder determinar una sentencia u otra en función de los daños reales que el perito psicológico determine que se han producido.
Por supuesto, para ello, empleará una serie de criterios que seguirá en base a sus conocimientos que, en este tipo de ocasiones, son puestos al servicio de la justicia. Esta figura del perito psicólogo con mucha frecuencia resulta clave para decantar una sentencia hacia un lado u otro, por lo que su aportación es fundamental. Por este motivo, en muchas ocasiones los abogados piden que se sometan los implicados al examen de este tipo de peritos para lograr saber si la otra persona está mintiendo o, al menos, exagerando con unos fines poco ortodoxos. Como tú mismo puedes ver, y a juzgar por su labor, resulta una figura clave para lograr preservar la verdadera justicia y que no se dicten sentencias injustas en base a un relato que puede ser falso.